Parte del trabajo más poderoso de IFES es también el menos visible. El Programa de Desarrollo de Apoyo Autóctono (ISD) es un claro ejemplo. 

Todo movimiento estudiantil requiere muchos tipos de apoyo, incluido el financiero, y puede suponer todo un gozo invitar a otros a apoyar la obra de Dios en IFES. Pero muchos movimientos nacionales han confiado desde hace tiempo en el apoyo de donantes extranjeros, lo que ha representado un desafío para la sostenibilidad del movimiento.  

Abordar este desafío implica enfrentar miedos personales y actitudes culturales sobre el dinero y el levantamiento de fondos, compartir enseñanzas bíblicas sólidas sobre el tema y proporcionar herramientas prácticas para conectar eficazmente con las personas que apoyan al ministerio de forma sensible con el contexto. A través de ISD, IFES ofrece formación y recursos para ayudar a los movimientos nacionales a entender la visión bíblica de la colaboración en el evangelio y da el conocimiento necesario para encontrar y desarrollar la colaboración que necesitan para que crezca su ministerio estudiantil.  

Por medio de estas colaboraciones pueden recibir oración, recursos, personal o finanzas. También sirven para afianzar el movimiento nacional en el contexto nacional o local. Como Director de ISD, Kehinde Ojo lo explica:  

El primer curso virtual de ISD, “Introducción al desarrollo de apoyo autóctono”, se lanzó en septiembre del 2019 en inglés y francés, con más lanzamientos en español, ruso y portugués a lo largo del 2020. Se trata de un hito importante en la multiplicación del impacto de ISD, y muchos movimientos ya están experimentando los beneficios. 

Tres participantes africanos francófonos diferentes de la primera promoción online han compartido sus reflexiones con nosotros, haciendo hincapié en cultivar las relaciones con los donantes, superar el rechazo y el miedo y comprender la base bíblica del levantamiento de fondos. Lee sus testimonios a continuación. 

El curso me permitió comprender la base bíblica del levantamiento de fondos para nuestra obra. ¡Qué alivio y aliento saber que Dios lo aprueba y está dispuesto a caminar con nosotros! El curso también aborda la comunicación con los donantes y enseña a formular el enfoque para los donantes potenciales. Así, aprendí a adaptar mi discurso a los oyentes para comunicar un mismo mensaje: la visión de GBU. Este curso también me ayudó a lidiar con el miedo al rechazo. Al pensar en la negativa de un donante potencial, me sentía paralizado. Pero después de este curso, entendí que hay muchas formas en que las personas nos pueden apoyar (tiempo, talentos, finanzas…). De hecho, también aprendí las razones por las que la gente realiza donativos. Me ayuda enormemente saber cómo debo acercarme a la gente para pedirles apoyo. 

En GBU Marruecos, las personas que nos apoyan están algo dispersadas por todo el mundo. Este curso me permite asegurar un buen acercamiento a estas personas de diferentes culturas y posiciones sociales. Ahora, de cara al levantamiento de fondos para el movimiento, sé cómo adaptar mejor nuestro enfoque. Nuestras relaciones con las personas que nos apoyan han mejorado enormemente. Y lo que es más importante: nuestro enfoque para movilizar apoyos ha cambiado fundamentalmente. 

Planeo compartir esta capacitación con el equipo de levantamiento de fondos del movimiento de cara a la próxima campaña de recaudación. Mi intención es centrarme en nuestro enfoque y comunicación con los donantes para que todo se centre en la gloria de Dios y la visión de GBU. 

La capacitación de ISD fue todo un «maná» para mí, porque se llevó a cabo en el momento en que yo estaba a cargo del tesoro del movimiento nacional, con los desafíos que conlleva. Esta formación es una herramienta de referencia que utilizo a diario. 

A nivel del movimiento nacional, comenzamos a entablar mejores relaciones con las personas que nos apoyan después de realizar es curso. Dejaron de verse a sí mismas como meras «fuentes» para verse como siervos del Señor, obreros como nosotros. Ahora entendemos que nuestro papel incluye la comunicación con las personas que nos apoyan, la oración por ellos y ayudarlos. También hemos empezado a enviar recibos a estas personas cada vez que abonan un pago, lo que siempre es de agradecer, ya que las ayuda a sentirse comprendidas y apoyadas. 

Estamos orgullosos de usar las 3T: tiempo, talentos y tesoros. ¡Y funciona! Alentamos y valoramos todos los recursos, incluso los donativos y servicios «más pequeños». Nuestro gran descubrimiento es la enorme cantidad de recursos perdidos que nuestro movimiento necesitaba. 

Durante la pandemia, aplicamos los principios aprendidos en la capacitación de ISD para recaudar donativos en materiales y en efectivo y distribuirlos. Esto trajo gran alegría a las personas que nos apoyan, a los movilizadores y a quienes recibieron estas donaciones. 

A pesar de las dificultades relacionadas con la crisis, ha emergido un entusiasmo real en nuestro país, especialmente entre las personas de escasos recursos económicos. Tengo la impresión de que la gente se ha vuelto aún más generosa, y de hecho creo que nosotros mismos hemos abierto los ojos a las oportunidades que ya existían. ¡Es extraordinario! ¡Que toda la gloria sea para nuestro Dios! Amén. 

Aprendí muchas cosas que mejoraron mi relación con los colaboradores del proyecto Jeribeth, el proyecto de construcción de las instalaciones del centro de formación de GBUAF. 

En primer lugar, la organización del curso virtual de ISD es excepcional. Combina cursos en la plataforma con reuniones por Zoom, lo que genera un espacio ideal para compartir. La formación en sí es rica porque tenemos la oportunidad de aprender unos de otros. 

Gracias a los enriquecedores estudios bíblicos, aprendí también algunos principios de movilización muy útiles. Los formadores se prepararon muy bien. Nos sorprendió la riqueza de las enseñanzas. Me bendijo especialmente el tema de la superación del miedo, que abordamos con el estudio bíblico sobre el caso de Moisés. Me ha resultado muy útil y me sirve hoy en mis esfuerzos por conseguir colaboradores para Jeribeth. Aunque sigo sintiendo miedo de vez en cuando, ahora tengo las herramientas para afrontarlo de forma eficaz. 

Por último, diré que el curso online es una experiencia que debemos promover y multiplicar en beneficio de todos los miembros de GBU, ya que reduce los costes y la distancia. En cuanto terminó el curso, empecé a profundizar en mis relaciones con los colaboradores del proyecto Jeribeth. He usado lo que aprendí para tranquilizarlos y, como resultado, contamos cada vez con más personas que regularmente se unen para apoyar el proyecto. De cara al 2021, ya cuento con importantes estrategias que sin duda ayudarán a retener a nuestros donantes actuales y a añadir a muchos más. 

Expreso mi agradecimiento por esta oportunidad y estos momentos de formación y capacitación. Recomiendo encarecidamente este curso a todos los miembros del equipo de GBU de todo el mundo. 

Es posible que muchos estudiantes nunca sepan sobre el programa de Desarrollo de Apoyo Autóctono. Sin embargo, los estudiantes se beneficiarían mucho si los movimientos nacionales dispusieran de las convicciones y las herramientas necesarias para fortalecer su base de apoyo. Y lo que es más importante: tanto del personal como los colaboradores crecerán en adoración a Dios y confianza en Aquel que es capaz y está dispuesto a proporcionar todo lo necesario para que su obra continúe. 

¿Te gustaría saber más sobre el curso virtual de Desarrollo de Apoyo Autóctono? Ponte en contacto con nosotros en hola@ifesworld.org.