Temas difíciles, charlas directas
“No tenía ni idea de que se podía hablar de sexo en una charla de una forma tan positiva. Siempre me habían dicho que era algo malo, algo de lo que avergonzarse”.
Esta joven no era la única que pensaba así. Los otros 150 estudiantes que asistieron al Congreso Bíblico de TSCF Papúa Nueva Guinea en junio agradecieron la oportunidad de debatir sobre las relaciones íntimas y ver qué es lo que dicen las Escrituras sobre el tema.
Juliette, una obrera de TSCF, explica:
“En Port Moresby (la capital), los jóvenes reciben una gran influencia de las tendencias culturales occidentales. Esto ha obligado a algunas iglesias a abordar temas de relaciones. Sin embargo, la mayoría de nuestros estudiantes vienen de zonas rurales, donde el único sitio donde han aprendido del tema es en una ‘clase de desarrollo personal’.”
Así que, el equipo decidió que el congreso de este año tenía que ayudar a los estudiantes a adquirir una perspectiva bíblica y ver a Cristo como el Señor de la sexualidad y del matrimonio.
Restricción de la libertad
Un estudiante de tercero de Derecho dice que la experiencia fue “reveladora”. Sintió que debía plantearse bien las cosas y no simplemente empezar una relación y “ver lo que pasa”. Quiere ser más intencional.
“El congreso dejó claro que el amor no se trata de satisfacer tu propio deseo, sino de compromiso, sacrificio y ayudar a la otra persona a acercarse más a Dios. Si de verdad amo a alguien, debo ayudar a guardar su corazón, su mente y su cuerpo del daño de la clase de intimidad que no agrada a Dios. Esto implica poner límites claros y rendir cuentas el uno ante el otro”.
También aprendió mucho sobre el valor de la persona y la integridad:
“Me he dado cuenta de que mi valor, mi seguridad y mi integridad solo están en Cristo, no en las relaciones, la aprobación, las experiencias sexuales o las expectativas culturales de ‘ser un hombre’. Ahora no lo veo como una restricción, sino como libertad: una forma gozosa, poderosa de vivir que honra a Dios y que protege lo que Él valora por encima de todo: Su imagen en mí y en otras personas”.
Del silencio al servicio
El congreso no solo enseñó a los estudiantes sobre las relaciones en el presente. También les preparó para el matrimonio ayudándolos a reevaluar las normas y expectativas culturales. Juliette explica:
“En esta cultura se presupone mucho, en vez de hablar las cosas. Esto significa que hay una alta incidencia de violencia doméstica y la gente no entiende muy bien los papeles y responsabilidades de los miembros de la familia, así que hay muchos ‘padres ausentes’. Y la poligamia está muy extendida y generalmente aceptada como un símbolo de fuerza masculina”.
David Walter, Secretario Regional de IFES para el Pacífico Sur, señala que este congreso ha sido muy estratégico:
“Es increíble poder ver que el movimiento nacional está hablando de algo que rara vez se trata dentro de la iglesia. La violencia contra la pareja, el fracaso del matrimonio y las agresiones sexuales son problemas generalizados. Así que, explorar la perspectiva bíblica como lo hicieron ellos también es una buena forma de servir a la sociedad”.
Ora
- Da gracias por la visión que tienen de tratar temas tan difíciles en este congreso, por su compromiso con las Escrituras y por el impacto positivo que están teniendo en los participantes. Ora para que los estudiantes puedan seguir exponiendo las convenciones culturales a la luz de la Palabra de Dios y que decidan honrarlo a Él.
- Hay dos hombres en el equipo de obreros (el Secretario General y otro obrero), pero este último se marcha a seguir estudiando. Ora para que el Señor anime a más hombres jóvenes a unirse al equipo de obreros. Actualmente hay cinco mujeres jóvenes que apoyan a los líderes estudiantiles en los diferentes campus.
- Dentro de poco, los estudiantes y obreros de TSCF viajarán las Islas Salomón para asistir a la Conferencia Regional del Pacífico Sur (del 11 al 14 de septiembre). Ora para que las enseñanzas y la comunión intercultural fortalezcan el testimonio estudiantil de cada uno de los movimientos y ora para que los países donde no haya un ministerio local de IFES puedan ser inspirados a empezar uno.