Sudáfrica: Dios responde a las oraciones por renovación

«Renovación» fue nuestro lema para el Día Mundial del Estudiante el pasado mes de octubre, cuando pedimos que Dios trajera una vida nueva al ministerio estudiantil en toda nuestra comunidad. Uno de los lugares donde estamos viendo respuesta a nuestras oraciones es en Sudáfrica, donde los esfuerzos por reconstruir los grupos de estudiantes cristianos que desaparecieron durante la pandemia han dado señales de vida y crecimiento en los últimos meses.

«El avivamiento del ministerio estudiantil en muchas universidades y escuelas va viento en popa», afirma Motseki Sosibo, Director Nacional de la Organización de Estudiantes Cristianos (Students’ Christian Organisation, SCO) el movimiento nacional de IFES en Sudáfrica. «Ver el hambre de los alumnos por conocer y seguir a Jesucristo es un estímulo. Seguimos viendo la fidelidad de Dios.»

El ministerio de la Universidad de Johannesburgo se vio duramente afectado por la pandemia: todos los grupos de SCO cerraron. Volver a ponerlos en marcha se complicó por el hecho de que, para inscribirse en la universidad, las organizaciones estudiantiles deben reclutar un número mínimo de participantes, a menudo entre 150 y 200 estudiantes. Alabemos a Dios porque en febrero, SCO llevó a cabo una campaña de captación e inscribió a suficientes estudiantes para que quedaran oficialmente registrados.

«Es una gran bendición, porque permitirá a la Unión Cristiana acceder a más recursos universitarios para compartir el Evangelio en el campus», afirma Motseki. En una segunda campaña de captación, que tuvo lugar el 27 de mayo, SCO pudo volver a presentar su ministerio a más estudiantes y compartir el Evangelio con aquellos que no habían oído hablar de Jesús.

En otra universidad, la Cape Peninsula University of Technology (CPUT), el grupo de estudiantes cristianos no ha dejado de crecer en número. Pero la vida universitaria se vio alterada en mayo, cuando las protestas estudiantiles, inicialmente pacíficas, acabaron en violentos enfrentamientos con la policía. Se cerraron todos los campus y se enviaron a los estudiantes a casa; solo se les permitió volver al campus el 5 de junio. «Por favor, orad para que reine la paz en todos los campus de CPUT», pide Motseki.

Afirma que el ministerio estudiantil en Sudáfrica es complejo, con muchas oportunidades pero también desafíos.

«En general, los alumnos están abiertos a escuchar el Evangelio. La recepción en la mayoría de los campus es cálida y acogedora. Pero el ambiente en algunos campus también puede estar muy politizado. Uno de los objetivos de SCO es capacitar a los estudiantes para que sean sal y luz y aporten una voz cristiana a la política estudiantil. Necesitamos oración en este espacio para que podamos ayudar a los estudiantes cristianos a aportar significado, esperanza y un impacto positivo en el ámbito de la política estudiantil.»

Otro reto al que se enfrenta el movimiento es la falta de obreros. Solo hay seis obreros en plantilla para un ministerio que se extiende por la universidad y las facultades de Sudáfrica y algunos institutos de enseñanza secundaria. Pero SCO ha respondido de forma creativa y estratégica, invirtiendo en líderes estudiantiles y poniendo en marcha un programa de prácticas de un año para ofrecer una vía de acceso a los futuros obreros.

Los dos becarios actuales, Thapelo y Sam, vieron varios avances fructíferos en el ministerio en el mes de abril. Thapelo colaboró con la Universidad Tecnológica de Tshwane (en Mbombela) para organizar su primer evento evangelístico desde la extensión de la COVID-19. Los estudiantes asistentes respondieron al Evangelio con el corazón abierto y el recinto se llenó por completo. Por otro lado, Sam y los estudiantes de la Universidad Walter Sisulu organizaron un evento de evangelización en el que más de 20 estudiantes se acercaron a Cristo.

Por favor, únete a nosotros en oración por los estudiantes de Sudáfrica: