Compartiendo nuestros retosAhí nos reunimos personas de toda Australia y más allá, ¡fue maravilloso recordar nuestra unión en Cristo, una unidad que incluye a los creyentes de todas las naciones y de toda la historia! Los grupos de AFES, y más en general, los Cristianos, están afrontando una mayor oposición por parte de la administración universitaria y de otros estudiantes, que se vinculan al gran cambio de la sociedad y un incremento en la secularización. Me sentí animado al reunirme con los estudiantes de otras universidades y escuchar los retos y las oportunidades que están afrontando y poder aprender los unos de los otros. También me animó escuchar los testimonios de los grupos de AFES que están volviéndose a Dios en oración según afrontan unos retos específicos y alabamos a Dios al verle obrar en las vidas en los campus. Asistí a una reunión dirigida por varios estudiantes de un contexto complicado en Eurasia, donde es ilegal evangelizar fuera de las iglesias registradas. A pesar de estas restricciones, han sido capaces de compartir los testimonios de personas que han llegado a la fe en Jesús. Escuchar a nuestros hermanos y hermanas en Eurasia me ha ayudado a poner nuestros propios retos en contexto.
Misión prácticaAl final de la conferencia, muchos grupos de AFES participaron en viajes misioneros, reuniéndonos con las iglesias locales y ayudando con sus campañas evangelísticas. Como parte de nuestro viaje misionero, visitamos un hogar de ancianos, hicimos una barbacoa para desayunar con los estudiantes de la escuela secundaria, recolectamos donativos de comida para distribuir la comida, e invitamos a gente a venir a los eventos de Navidad. Esto nos proporcionó una oportunidad excelente para poner en práctica inmediatamente lo que habíamos estado aprendiendo en los cinco días anteriores. Jesús sigue transformando vidasNTE nos ha proporcionado un recordatorio vital de que Dios se sigue revelando a través de las escrituras, y a través de su hijo vivo, Jesucristo. Él es quién nos transforma y nos hace ser más como Él. Me he sentido retado a apoyarme en Dios de una forma más profunda; en mi vida de oración, en cómo planifico mi futuro, y en mi deseo de compartir el Evangelio con los demás. Me he sentido retado a orar más, como una expresión de mi apoyo en Dios. NTE fue una oportunidad increíble de aprender de la palabra de Dios en comunión con el pueblo de Dios. Oren para que Dios siga trabajando en las vidas de los estudiantes que asistieron y que proclamen el Evangelio con valentía a sus amigos, familiares y compañeros de clase. ¡Gracias por orar con nosotros! |