
Asia del Sur: El Evangelio Innegable
No puedes registrar una iglesia. No te está permitido evangelizar. Es posible que te quedes sin agua o sin electricidad. En este país de Asia del Sur, a los cristianos les son denegadas muchas cosas. Sin embargo, no se les puede denegar una cosa: el poder del evangelio para salvar.
Testimonios innegables
Durante sus primeras semanas en la universidad, Chandra* estaba siempre metido en problemas. Era un joven enfadado e insolente. Su consumo excesivo de alcohol hacía que acabara en peleas. Sin embargo, hacia el final del primer año, su vida dio un vuelco. El grupo estudiantil lo acogió y él recibió a Cristo. Él nos dice:
“Mirando hacia atrás, lo que me mostró la realidad del evangelio fue que, en vez de juzgarme, me aceptaron con amor a pesar de mis defectos”.
Tashi* estaba en un mal momento cuando llegó al campamento. Se sentía tan deprimida que estaba considerando acabar con su vida. Sin embargo, después de escuchar las charlas acerca de Jesús, el Buen Pastor que ama y aprecia a sus ovejas, se dio cuenta de su valor real. Nos dice:
“Cambió mi vida. De verdad puedo decir que yo no estaría aquí hoy si no hubiera ido a ese campamento y hubiera escuchado las palabras de Jesús para mí”.
Retos innegables
A pesar del impacto positivo del evangelio que el ministerio estudiantil está marcando en 10 campus (y seis grupos de graduados), tanto las reuniones como los campamentos están, a menudo, bajo sospecha por parte de las autoridades e, incluso, de algunos de los pastores más mayores de las iglesias. El año pasado, el obrero que lidera el movimiento fue arrestado e interrogado. Al cabo de muy poco, fue puesto en libertad, pero, como precaución, cambiaron la ubicación del campamento de verano de tres días a otro país cercano.
Para los estudiantes, convertirse en cristianos puede significar ser excluidos de su familia. También puede traer discriminación y dilemas difíciles como, por ejemplo, qué hacer cuando se espera que asistas al templo del campus para orar con los otros estudiantes.
Esperanza innegable
Pero Dios ha estado obrando durante los últimos 15 años: algunos de los profesores participaron en el movimiento en sus años como estudiantes, por lo que pueden ayudar a los estudiantes de hoy para que no tengan que ir al templo para hacer las oraciones.
Cuatro voluntarios (dos graduados y dos pastores jóvenes) se han unido al obrero que lidera el movimiento. Juntos, cada año hacen tres viajes de 45 días por todo el país para fortalecer los grupos liderados por estudiantes y para promover el ministerio entre los pastores de las iglesias.
Con esta base cada vez más sólida y su catálogo de testimonios poderosos, el equipo espera que el movimiento siga floreciendo, a pesar de las presiones. Están trabajando para convertirse en miembros oficiales de IFES en la Asamblea Mundial de 2027.
Recientemente, en un campamento, un estudiante preguntó por qué estaba experimentando persecución a pesar de esforzarse tanto para seguir a Jesús. La respuesta del ponente lo reconfortó: “En Cristo, encontramos las cosas buenas en los momentos difíciles”.
Ora
- Da gracias a Dios por el campamento de invierno que tuvo lugar en enero, en el que asistieron 90 estudiantes (incluyendo seis que no eran cristianos) y 45 graduados. Ora para que conozcan la esperanza innegable del evangelio y la compartan con sabiduría y coraje.
- Pide al Señor que fortalezca y proteja al obrero líder y que provea más obreros a tiempo completo. Ora para que muchos cristianos de la zona entiendan la visión y contribuyan a la obra y para que tanto estudiantes como graduados, así como la diáspora, apoyen el ministerio sostenible.
- Da gracias por todas las cosas innegablemente buenas de las que ha sido testigo este movimiento durante los momentos difíciles en los últimos 15 años. Ora por ellos a medida que desarrollan el comité incipiente y finalizan su constitución con el objetivo de poder afiliarse a IFES.
*Se han cambiado los nombres para proteger sus identidades.