Brasil: ¿Debemos humillar a los nuevos estudiantes?
En muchos lugares del mundo, los estudiantes soportan distintos tipos de “ritos de iniciación” cuando entran en la universidad. Algunas costumbres son completamente inocuas: usar ropa embarazosa, probar comidas extrañas o pasar tiempo sin dormir. Pero con frecuencia la “diversión” de las novatadas, que están a la orden del día en América del Norte y Europa y que están de moda en el Sur de Asia, implica unas actividades más intensas con el consumo de grandes dosis de alcohol, racismo, abuso sexual, actividades ilegales y una humillación intensa.
Los estudiantes de ABUB Brasil decidieron que debían oponerse a estos ritos de iniciación, conocidos localmente como trote. Al igual que en otros lugares del mundo, el trote ha causado daños físicos graves y traumas psicológicos y, en algunos casos, la muerte.
¿Qué llevó a estos estudiantes a tomar cartas en el asunto? Estaban asistiendo a un programa para el desarrollo del liderazgo de tres semanas a principios de este año en el que se centraron en estudiar el libro de los Hechos de los Apóstoles. El tema del evento se basaba en el primer capítulo “…. Y serán mis testigos”. Cuando se vieron retados a leer el libro de los Hechos como si fuera un libro en continuo al que estaban contribuyendo ellos mismos, y decidieron actuar.
Primero, escribieron una carta abierta a la universidad que firmaron 56 estudiantes. En ella declaraban su firme posición contra el trote:
“Como estudiantes que dan testimonio de Cristo en la universidad, queremos dejar constancia en esta carta abierta, de nuestro desacuerdo y nuestra protesta contra cualquier clase de acto violento, inmoral y prejuicioso que se basa en los valores jerárquicos sobre los que se constituyen las prácticas abusivas del trote. Nos negamos a participar de la lógica opresiva que legitimiza un trato agresivo y humillante a los que se unen a la vida académica o a los que ya son estudiantes.
Los ritos de iniciación no son el problema en sí, sino la forma en la que tienen lugar y las implicaciones que tienen en el contexto universitario. La universidad es un espacio que debe ser acogedor, pero estos ritos fomentan la opresión, la inmoralidad y la violencia.”
Estudiantes de ABUB Brasil en la Universidad de Uberaba-MG celebran un picnic de bienvenida, con fotos conmemorativas y ofrecen abrazos gratis para los estudiantes de primer año.
Esta carta fue enviada a los demás grupos de ABUB del país. Y los estudiantes respondieron creando alternativas al trote. Un grupo, con el apoyo oficial de la universidad, creó una guía para los estudiantes nuevos que consistía de información acerca de la universidad y de ABUB. Mientras que otros grupos organizaron una serie de actividades: malabares, teatros, bandas de música y comida.
Algunos grupos crearon el “Abrazo Trote”, consistente de abrazos y un manual sobre la vida universitaria. Otros grupos intentaron estar presentes y disponibles para ayudar, compartiendo a su vez su fe y entregando Biblias.
Ana habló del fruto de darles la bienvenida a los nuevos estudiantes:
“Tras conocer a los estudiantes de primer año, muchos de ellos se han acercado a nosotros buscando información sobre alojamientos. Es una gran forma de mantenernos en contacto. El año pasado, un estudiante que vino a nosotros de esta forma empezó a venir a nuestras reuniones y aceptó a Cristo.”
Esta carta abierta concluía: “Estamos llamados a ser agentes de reconciliación, y llevar el poder del amor y la vida que encontramos en Cristo a la universidad y frente a las prácticas dominadas por las ‘fuerzas de la muerte’”.
Por favor, oren por los estudiantes de ABUB mientras se esfuerzan por ser los que les dan la bienvenida a los estudiantes nuevos y fomentan la reconciliación. Y, ahora que las universidades del hemisferio norte comienzan las clases a lo largo de este mes y el siguiente, oren también para que los movimientos de IFES se enfrenten a la injusticia, al racismo, al abuso y al odio, en cualquier forma, aunque ello implique adoptar una posición impopular frente a las novatadas.
Gracias por sus oraciones.
Escrito por Penny Vinden para IFES