Acción: migración, desplazamiento y reconciliación
¿Podemos ofrecer una voz de esperanza ante este reto global?
El primer número de Palabra y Mundo de IFES, publicado el año pasado, preguntaba cómo podemos responder los cristianos al tema global de la migración.
Solemos pensar que la migración es simplemente cuando una persona deja un país y se va a vivir a otro. Pero “migrante” se puede definir como “una persona que se traslada, temporalmente o de manera permanente, de un lugar, zona o país de residencia a otro”. Algunos migran por decisión propia, pero otros muchos lo hacen como respuesta a la guerra, al conflicto, al hambre o al miedo.
Desplazamiento interno
Los medios de comunicación principales suelen centrar su atención en las personas que migran cruzando fronteras nacionales, pero hay muchos que se ven obligados a huir de su hogar y que permanecen dentro de su propio país. Las personas desplazadas internamente se llaman a menudo “refugiados”, pero carecen de muchas de las protecciones legales que amparan a aquellos que huyen a otro país.
Rob Heimburger, editor de Palabra y Mundo, tiene experiencia directa apoyando a algunos de los 7 millones de desplazados internos en Colombia, el segundo grupo de población desplazado más grande del mundo después de Siria. Estos dos países están sufriendo los efectos a largo plazo de una guerra civil.
Tras el conflicto entre el gobierno y las guerrillas izquierdistas, un gran número de personas en Colombia se ha visto obligado a huir de pueblos y granjas. Muchos se han asentado en la periferia de las ciudades y otros han acabado viviendo en barrios marginales.
Reconciliando a las personas y a las comunidades
En los países afectados por la guerra civil una reconciliación profunda y real es difícil pero extremadamente necesaria. Un proyecto en el que Rob está participando en Medellín ayuda a las comunidades a prosperar y reconcilia a las personas y a las comunidades afectadas por la guerra civil. Los proyectos como este demuestran un compromiso con una exposición y aplicación bíblica rigurosa y nos llaman a poner en práctica nuestra fe frente a los problemas que nos rodean: problemas locales, nacionales y globales.
Palabra y Mundo ofrece una reflexión teológica sobre la migración, viéndola como un tema que aparece a lo largo del Antiguo y del Nuevo Testamento, donde un Dios migrante llama a un pueblo migrante.
Hay cristianos entre las personas que migran. También hay muchos cristianos que son los primeros en acoger a los migrantes en su país. Pero hay otros que exigen orden y se oponen a la migración. ¿Cuál debe ser la respuesta cristiana? ¿Qué respuesta ofrece la Palabra de Dios ante estas difíciles situaciones de migración?
Responda
¿De qué manera están ustedes, o los estudiantes de su universidad, respondiendo al tema de la migración? Nos encantaría que nos contaran las formas en las que su universidad trata, desafía y ora por la migración. ¡Dejen un comentario!